El pollo si es macho recibe el nombre de gallo, mientras que si es hembra recibe el nombre de gallina. Los pollos son criados principalmente en cautividad por su carne y por sus huevos (también se usan sus plumas o el excremento que generan) por lo que podemos encontrar pollos en cualquier parte del mundo. Se estima que la población actual de pollos en el mundo supera los trece mil millones de aves.
Los pollos son omnívoros e insectívoros. Se sabe que en cautividad y por el estrés al que se ven sometidos llegan a producirse actos de canibalismo entre ellos por lo que la normativa actual permite que se les ampute parte del pico para evitar en la medida de lo posible dicho comportamiento. La esperanza de vida de los mismos se sitúa entre los cinco y los diez años de vida.
Los pollos se caracterizan por tener dos protuberancias en la cabeza: una de ellas es la cresta y la otra son los lóbulos que le cuelgan del pico. El cuerpo de los pollos está cubierto por plumas y existe una clara diferencia entre los gallos y las gallinas. Los gallos suelen alcanzar los cuatro kilos de peso mientras que las gallinas rara vez superan los dos kilos de peso.
En libertad, los pollos son gregarios y tienen una jerarquía muy definida. El gallo se encarga de vigilar y de proteger al resto de gallinas mientras que las gallinas se encargan de cuidar a los píos o polluelos.