El reloj tal como lo conocemos es un invento relativamente nuevo, que vino a fundamentar la necesidad de mensurar el tiempo de forma precisa a partir del Siglo XVII como consecuencia de la revolución industrial.
Los antiguos no utilizaban relojes como los actuales para medir el paso del tiempo sino que se fiaban de relojes que funcionaban con agua. En este artículo aprenderemos a hacer uno con un funcionamiento similar al de un reloj de arena. Para ello necesitas:
- 1 botella de plástico de 1L
- Vaso de plástico
- Agua
- Cinta de Papel Adhesiva
- Un reloj con segundero
Pasos
- El primer paso es cortar la botella por debajo del cuello del envase, cuidando que la terminación quede prolijamente recortada y tomando como referencia el diámetro del vaso plástico.
- Luego, desde el cuello de la botella hasta la base del envase, coloca la cinta de papel adhesiva, sobre la cual marcarás la referencia de tiempo. Antes de estas mediciones, realiza un agujero pequeño en la base del vaso para posteriormente colocarlo dentro de la botella, de manera que un recipiente quede encajado dentro del otro.
- Para calibrar el reloj, comienza a verter agua dentro del vaso, y con ayuda del reloj con el que tú si cuentas, realiza una marca cada 10 segundos. Puedes realizar todas las marcas que te permita el envase.