La capilaritis es una inflamación de los capilares que desencadena erupciones cutáneas. Sucede con mayor frecuencia en adultos, siendo común la zona de las piernas. Se manifiesta con eritemas, máculas, pápulas de color morado, necrosis o púrpuras. Es una enfermedad asintomática, pero visiblemente se detecta a través de las manchas que provoca en la superficie de la piel, que en ocasiones producen picazón.
Hay ciertos factores que podrían desencadenar la aparición de una capilaritis, aunque no se sabe con certeza qué es exactamente lo que causa esta patología. Cierto tipo de alergias o efecto adverso al ingerir un medicamento determinado, como el ibuprofeno y la aspirina; éstos han sido asociados a la aparición de una capilaritis. Realizar ejercicio excesivo también podría ser un peligro para los capilares del organismo, específicamente los de las piernas y aun más, si se realiza con un clima caluroso.
Primero aparecen manchas de color rojo o morado, con el tiempo, a veces semanas o incluso meses, cambian a un color más amarillo o marrón. Estas manchas no se curan, sólo hay que esperar que desaparezcan por sí solas e intentar identificar la causa, para poder detener la expansión de éstas y evitar la producción de otras.
Una patología muy relacionada con la capilaritis es la enfermedad de Schamberg, ésta es una de las causas más comunes, la cual se manifiesta a través de cambios de pigmentación en la piel, llamadas púrpuras pigmentosas. Las manchas son entre color marrón y rojo y no se contagian, ya que no son producidas por ningún tipo de virus, bacteria u hongo, sino, por un ataque autoinmune, en el cual los linfocitos atacan a los capilares y los destruyen. También es muy frecuente que suceda en las piernas.