Crayola es una empresa que se dedica a la producción de lápices de colores, crayones, marcadores y otros utensilios relacionados con la escritura y el arte del dibujo. Se fundó en 1885, en Nueva York, y hoy en día está presente en más de 80 países del mundo con sus productos. A comienzo del siglo pasado la Crayola empezó con desarrollar su compromiso en el ámbito educacional: en 1902 ganó una medalla de oro por haber lanzado en el mercado la primera tiza blanca inodora. En 1903 la Crayola, que todavía se llamaba Binney & Smith, lanzó la primera colección de crayones aptos para niños, destinada a abrir una significativa página en la historia de los productos para la infancia.
El nombre “crayola”, con el cual se nombró el nuevo producto, deriva del francés “craie” (tiza) y de “ola” (raíz latina para el término aceite); el nombre fue una idea de Alice Binney, esposa del fundador y antigua profesora de escuela. Los crayones son el símbolo y el producto más conocido de la empresa, que los ofrece en cajas de varias medidas, desde las cajas básicas de 8 colores hasta las cajas de 800 colores, pasando tradicionalmente por muchos múltiples del número 8.
El color más famoso es el azul, que se produce en seis distintos tonos como el cielo azul y el azul violeta. En Pennsylvania, y más exactamente en la ciudad de Easton, se ubica el “Crayola factory”, que incluye las principales oficinas de la empresa y un museo interactivo en que se puede observar todo el ítem de la producción y conocer la historia de la Crayola.
Una curiosidad: el olor característico de los crayones Crayola se considera entre los más conocidos a nivel mundial.