En esta carpeta de cuero aplicaremos la técnica de repujado en bajorrelieve, realizando un ramillete de margaritas que colocaremos en uno de tos ángulos inferiores de la carpeta para poder escribir sobre ésta sin que el ornamento moleste al uso.
Materiales y herramientas
- Papel
- lápiz
- papel vegetal
- regla
- plancha con plastilina
- trazador
- modelador
- esponja
- cola blanca
- pegamento de contacto
- chifla
- baldosa
- cartón grueso
- cartulina
- piel de cerdo
- badana
- tridente
- punzón
- martillo
- hilo de cuero
- cera
- trapo
Instrucciones
- Dibujamos las flores en un papel, lo reproducimos en papel vegetal y calcándolo sobre la piel recortada y húmeda, lo transferimos con el trazador en lo que será la esquina inferior izquierda de la tapa superior de la carpeta. Lo colocamos sobre la plancha de plastilina y procedemos a repujarlo con el modelador, presionando las líneas exteriores que componen el dibujo y dando volumen a las margaritas.
- Una vez finalizado el repujado, se deja secar sobre la plastilina y se rellena de cola el reverso del dibujo para que permanezca el relieve.
- A continuación, recortamos una cartulina con un milímetro de perímetro más pequeño que la medida de la badana y cuando la cola está bien seca, se adhiere el cuero a la cartulina con pegamento de contacto.
- Se recortan dos cartones gruesos, se liman los cantos y se adhiere como en el caso anterior. Aunque las medidas totales de la carpeta sean distintas, los márgenes han de ser los mismos.
- Luego, se recorta la piel interior con las mismas medidas que la badana y se unen con pegamento de contacto. Recortados los bolsillos, se rebaja con la chifla uno de los lados donde se hará un pequeño dobladillo pegado para que no se vea el canto de la piel.
- En los otros lados, se da un poco de cola y se unen a los laterales de la carpeta. Para el cosido, marcamos una línea con el trazador alrededor de la badana. Martilleando el tridente y el punzón (para las esquinas), iremos haciendo agujeros a intervalos regulares.
- Luego, con el hilo de cuero y con el cosido simple, vamos uniendo las piezas, rematando el extremo del hilo con cola. Por último, enceramos la carpeta como en otras ocasiones