Para poder llevar la contabilidad de un negocio pequeño se necesita ser estratega y listo para poder gestionar las transacciones, tales como manejar efectivo, tarjetas de crédito, cheques pagos y crédito. Aprende como poder llevar con éxito la contabilidad de tu negocio con los siguientes puntos.
1. Gestión de efectivo.
El efectivo (billetes y monedas) suele ser la manera más común, sencilla y quizás la más segura de hacer pagos, y lo es más para los pequeños negocios. La tecnología avanza constantemente y nos brinda muchas más alternativas, aunque algunos pequeños negocios insisten en usar únicamente este método sin preguntarse el que quizás esté obstaculizando o limitando y les impida expandirse, así es que analiza bien tu negocio y verifica si usando solo este método te pueda ser de utilidad.
Al usar esta práctica asegura el recibo de fondos inmediatamente y se evita hacer tanta contabilidad, por lo que podría ahorrarnos muchas horas de trabajo y estrés. También, se evita estar pendientes de terceros para hacer o recibir pagos, todo llega directamente a tus manos.
2. Gestión de cheques.
A pesar de que va en aumento el uso de tarjetas de crédito y de débito, los gastos adicionales que generan podrían ser engorrosos y no del todo ideales para un pequeño negocio. Si tu quieres ofrecer una alternativa más aparte de aceptar efectivo, entonces considera aceptar cheques. Aunque para proteger a tu negocio y a tus clientes, deberás entender perfectamente las leyes y reglamentaciones que regulan las Políticas de Cheques.
Las políticas más comunes suelen ser:
a) Los cheques deben ser de un banco local o estatal.
b) Los cheques no debería tener un monto mayor a la compra total.
c) Los cheques no deben ser aceptados sin estar enumerados, o si la información y contenido está escrita de manera incorrecta.
d) Al recibir cheques, estos deberán ser depositados inmediatamente, ya que los bancos podrían rechazarlos en caso de que estos no tengan fondos o tengan algún fallo.
Instruye a tus empleados a examinar cuidadosamente cada vez que reciban algún cheque, que cada uno de ellos esté correctamente personalizado, con la fecha, datos del banco, y monto total correctos, así como la firma de quien hará el pago.
3. Aceptar tarjetas de crédito o débito.
Las tarjetas de crédito y débito son el método más común y fácil de pago, de uso muy conveniente y flexible, han tenido un crecimiento significativo en el comercio. Si deseas expandir las alternativas para tus clientes, ten en consideración los pros y los contras. Hay que tener sus debidas precauciones al no caer en el error de aceptar una tarjeta fraudulenta, también al usar algunas tarjetas de crédito, se generan pequeñas tasas, que al final del año, podrían sumar unas cuantiosas cifras.
Al aceptar pagos con tarjetas, al menos al principio le costará un dinero y proceso extra a tu negocio.
4. Opción a crédito.
Al ofrecerles un crédito a tus clientes, les das la oportunidad de adquirir tus productos o servicios hoy, y que ellos puedan ir pagando poco a poco. Al brindar este método, se asume que el cliente tiene solvencia para pagar a corto o largo plazo ya sea con tarjeta, cheques o depósitos de efectivo a tu cuenta bancaria. Observa si realmente tu negocio necesita de esto, si ofreces crédito a tus clientes, podría ser un factor que permita mantener a flote a tu negocio y facilite la compra de tus productos o servicios.