Definimos a un indicador económico como un dato estadístico sobre la economía que permite el análisis de la situación y rendimiento económico pasado y presente así como realizar pronósticos para el futuro.
Los indicadores económicos incluyen varios índices e informes. Existe por ejemplo el índice de desempleo, el Índice de Precios al Consumo o IPC, el de Producción Industrial, el Producto Interior Bruto o PIB, etc. Los indicadores económicos son manejados y publicados por instituciones gubernamentales así como entes privados.
Los indicadores económicos se pueden clasificar según varios criterios. Así podríamos dividirlos en varios tipos.
Tenemos por ejemplo el indicador económico líder, que es aquel cuyo valor cambia antes de que lo haga la economía. Un ejemplo sería el IPC.
Los indicadores rezagados, que son aquellos cuyo valor cambia después de que haya cambiado la economía.
Indicador económico coincidente. Se trata de aquel cuyo valor cambia cuando lo hace el ciclo económico. Por el ejemplo, el PIB o las ventas al por menor son considerados indicadores coincidentes. Los indicadores coincidentes son muy útiles para identificar los posibles picos y valles dentro del ciclo económico.
Otra clasificación muy utilizada se basa en la dirección del indicador respecto a la dirección del ciclo económico global. Así, podemos hablar de indicadores procíclicos, que son aquellos que se mueven en la misma dirección que la economía. Crecen cuando la economía va bien y disminuyen cuándo la economía va mal. El PIB es un indicador procíclico. Por otro lado están los indicadores contracíclicos, aquellos que se mueven al contrario de la economía. Por ejemplo, la tasa de desempleo crece cuándo la economía va mal. Y por último tenemos los indicadores acíclicos. La dirección de estos indicadores no tiene correlación, o es muy pequeña, con la dirección del ciclo económico, pudiendo subir o bajar en cualquier momento.