Tengo problemas para abrir una cuenta corriente después de la bancarrota

Declararse en bancarrota es un recurso que nos permite comenzar de nuevo y eliminar todas nuestras deudas. Sin embargo tras la quiebra encontraremos muchos obstáculos que afrontar. Por ejemplo si tenemos una cuenta corriente en el proceso de quiebra puede ser difícil abrir una nueva cuenta. Veamos qué hacer en estos casos.

Una estrategia a seguir consiste en abrir una nueva cuenta en un banco nuevo que nunca hayamos usado antes de presentar la quiebra. Si ésta ya ha sido presentada todavía hay opciones que probar. Aunque es probable que ya figure en una base de datos nacional para determinar si usted tiene un historial de los descubiertos pendientes de pago, existen opciones como las Uniones de Crédito, cooperativas de crédito que tienden a ser más tolerantes de la quiebra en las cuentas anteriores.

Algunos bancos o cooperativas de crédito también podrían requerir abrir por primera vez una cuenta de ahorros y mantenerlo en buen estado por una cantidad fija de tiempo antes de que abran una cuenta de cheques para usted.

Otro subterfugio sería la Comprobación de Segunda Oportunidad; algunas entidades bancarias ofrecen como segunda oportunidad cuentas de cheques. También puede recurrir a tarjetas de débito prepago o a una cuenta de tarjeta de nómina. Este tipo de cuenta le permite recibir depósitos directos o agregar dinero. Por otro lado estas cuentas no incluyen cheques. La mayoría también tienen un sistema de pago de facturas en línea, donde usted puede programar los pagos y el banco le envía un cheque directamente al destinatario. Estas cuentas generalmente tienen diferentes tarifas.

Si nada de esto resulta realizable no se preocupe, todavía pueden haber opciones para poder seguir operando. En estos casos no dude en acudir a un experto o asesor financiero que le aconsejará sobre cuáles son las mejores opciones para usted.