Ventajas de compartir piso para ahorrar gastos

Cuando, por el motivo que sea, nos planteamos la necesidad de alquilar un piso, nos asaltan las dudas sobre si compartir o no la vivienda y los gastos. La incertidumbre sobre el tipo de personas con que nos podemos encontrar y la complicación de tener que compartir el espacio vital puede suponer un obstáculo a la hora de decidirnos por esta opción.

Pero si nos ceñimos de forma estricta y objetiva a la cuestión económica, el ahorro es evidente a todas luces. Por ello, si contamos con el hecho de que se producirá la división de los costes fijos y de los gastos de la vivienda, estaremos ahorrando a partir del cincuenta por ciento. Este ahorro aumenta en función del número de compañeros. Además, si realizamos la compra en conjunto y cocinamos un menú para todos, reduciremos sustancialmente al poder aprovechar los productos y dividir también esta partida de gasto cotidiano.

Pero a parte de los beneficios para nuestro bolsillo, hay otros factores adicionales que debemos conocer y valorar. Y es que, como reza el saber popular, la unión hace la fuerza. Si compartimos piso, combatiremos la soledad de la gran ciudad mejor y podremos recibir apoyo en todo tipo de situaciones que deberíamos afrontar personalmente si viviéramos solos: compartir información, dividir las labores domésticas, recibir auxilio en caso de enfermedad…

Las claves para limar asperezas y aproximar posturas residen en crear un clima de convivencia adecuado. La tolerancia será la clave del éxito. Probablemente también nosotros tengamos defectos aunque no los percibamos tan claramente, así que realiza siempre críticas constructivas y acepta con una sonrisa las que recibas.