Como explicar nuestros aspectos negativos en una entrevista de trabajo

Puede que resulte incómodo tener que tocar algunos temas durante una entrevista de trabajo. El hablar de nuestros aspectos negativos nos podría hacer pensar que con ello ya tenemos la entrevista y por ende, el trabajo perdido. Pero no es así.

Incluso al hablar de temas que pudieran ser contraproducentes, si se dialogan con calma, confianza y completa sinceridad se podría conseguir el efecto opuesto. Así es que manos a la obra y a seguir paso a paso lo que a continuación se recomienda.

– Analiza bien lo que se habla en la entrevista y entiende muy bien las preguntas. En una entrevista laboral no importan en realidad tus aspectos negativos, sino cómo has lidiado con ellos, si estás consciente de ellos y qué has hecho para remediarlos. Si contestas “no tengo aspectos negativos”, entonces será más que obvio que te falta conciencia en ti mismo.
Es importante que comprendas que estar consciente de tus aspectos negativos no te hace un mal candidato. El conocer eso de ti, hacer algo al respecto para gestionarlo y remediarlo es lo que importa.

– Analízate. Con regularidad deberías auto examinarte y detectar con completa honestidad cuáles son tus fallos. Si tu desconoces qué aspectos han entorpecido tu trayectoria profesional, no podrás comunicarte eficientemente con los demás y como consecuencia, será muy complicado obtener los mejores trabajos. Procura hacer esto en periodos de 3 a 6 meses.

– Se honesto y estratégico a la vez. Si dices “Soy perfeccionista y exigente y gracias a ello es que siempre tengo a gente responsable trabajando a mi cargo” cuando esto en realidad no lo es, podría no ser una buena idea. Cuando alguien te pida decir un punto negativo de tu persona, se sincero y di la verdad. Pero aprovecha esta oportunidad para ponerte un paso adelante y demuestra cómo es que has ido eliminando esos malos detalles de tu persona.

– Por cada aspecto negativo que menciones, agrega otro positivo, para que haga contrapeso y le permita al entrevistador conocer cómo has aprendido a gestionar con esas dificultades en tu experiencia laboral. Ejemplo:

“Soy de las personas que suele ser muy perfeccionista y que le gusta trabajar tiempo extra. En ocasiones me pongo nervioso y molesto cuando observo que mis colegas de trabajo no dan todo de ellos mismos en sus labores. Sin embargo, ya me he percatado de esa debilidad en mi persona, por lo que desde hace ya un tiempo me he puesto el compromiso de que antes de decirle algo a alguien, mejor comenzar a preguntarme a mi mismo el porqué ese colega está teniendo dificultades y analizo si existe una manera en que pueda ayudarle”.

Sobre el artículo

Categorias: Profesiones
Ultima modificación: 07/02/2013