La caligrafía de los niños, va mejorando y evolucionando con la edad. En un principio sus trazos son inseguros y grandes para convertirse luego, con el paso de los años en su propia y característica manera de escribir.
La grafología, es otro aspecto de la escritura y es la que revela datos de nuestra personalidad a través de nuestra letra, por eso aunque algunas letras puedan parecerse unas a otras, todas tienen características especiales.
Muchas veces la letra de los adultos también resulta ilegible, un claro ejemplo es la de los médicos, es común escuchar eso de tienes letra de médico, cuando tu letra es difícil de descifrar.
Por eso es conveniente enseñar a los niños desde bien temprano a tener una buena caligrafía. Que resulte legible, puesto que la escritura es fundamental para expresarse. Una actividad única que solo podemos desarrollar los humanos, por lo que debemos conservarla y que mejor manera de hacerlo que a través de una bonita caligrafía.
A continuación te enseñamos con una serie de sencillos pasos como ayudar a los más pequeños a escribir con una letra bonita y legible por todos.
Cuando el niño todavía es lo suficientemente pequeño para aprender a escribir déjale a mano, lápices y bolígrafos, así como también folios o un blog de notas. Así se familiarizarán con ellos y cuando comiencen a escribir ya estarán acostumbrados a cogerlos.
Al principio comenzarán a escribir en la escuela, lo harán primero con tan solo letras, para luego ir evolucionando hacia la escritura de palabras. Para ello en los centros educativos suelen utilizar cuadernos especiales para este tipo de actividad, en la que el niño tan solo deberá copiar la letra o la palabra de muestra.
Con el tiempo cuando ya sepan escribir es fundamental que cojan de manera correcta el lápiz o el bolígrafo. Esto les ayudará a escribir mucho mejor.