Los fenicios fueron un pueblo originario del Medio Oriente, por lo que se les considera asiáticos occidentales. Su cultura se desarrolló durante más de tres mil años, entre el 3,200 a.C. hasta el 400 d.C. aproximadamente. Fueron herederos y promotores de una gran cultura y desarrollo. Fueron un pueblo de letras, desarrollaron alfabetos y literatura, levantaron bibliotecas, realizaron inventos y descubrimientos, cultivando pensamientos científicos, filosóficos y religiosos. Para muchos fue el primer pueblo del conocimiento.
Crearon grandes ciudades, impulsaron el comercio e hicieron grandes aportaciones a la organización de la vida social, económica, política y religiosa del mundo antiguo. La cultura fenicia se difundió por el mundo conocido y se la considera como la primera cultura global multinacional en la historia abarcando desde el Medio Oriente y norte de África hasta el sur de Europa y las islas mediterráneas. La cultura fenicia es un componente fundamental de la cultura mediterránea de ayer y hoy. Actualmente aún podemos identificar la continuidad y evolución del pensamiento fenicio en muchos pueblos y culturas.
Los fenicios son de origen cananeo, clasificados en el grupo de asiáticos occidentales, grupo que comparten con los amoritas. Los cananeos habitaron la región que hoy corresponde a los países de Líbano, Siria, Palestina, Israel y Jordania. En la actualidad la población autóctona de esta región desciende de fenicios y arameos. A partir del 1,200 a.C. se expandieron por todo el Mediterráneo.
En la actualidad se calcula que el seis por ciento de los habitantes del Mediterráneo tiene genes fenicios; en algunos lugares esta presencia alcanza gran parte de la población como ocurre en Chipre, Sicilia, Malta y el norte de Marruecos. Ciudades importantes del Medio Oriente como Sidón o Tiro, del norte de África como Cartago, y de España como Cádiz tienen origen fenicio.