La cultura olmeca se desarrolló en la parte sur de la llanura costera del Golfo de México, comprendida entre los ríos Papaloapan y Grijalva, que corresponde a la mitad norte del istmo de Tehuantepec. Actualmente, esta zona corresponde al sureste del estado de Veracruz y el oeste del estado de Tabasco, en México. Se trata de una zona húmeda de clima cálido, condiciones que seguramente existieron también en la época precolombina durante el apogeo de los olmecas
La civilización olmeca se constituyó principalmente alrededor de tres centros ceremoniales: San Lorenzo, La Venta y Tres Zapotes, además de manifestarse en otros sitios como Takalik Abaj en Guatemala, además de Belice, El Salvador, Honduras y Nicaragua.
El centro olmeca más antiguo del que se tiene constancia es el de San Lorenzo, datado alrededor del 1150 a. C. aproximadamente, en el actual municipio de Texistepec, situado en la cuenca del río Coatzacoalcos, en el estado de Veracruz. El inicio del florecimiento de la cultura olmeca en San Lorenzo comenzó alrededor del siglo XI a. C.
La Venta fue el centro ceremonial más importante de los olmecas. Estos centros ceremoniales tenían función de ciudades, y en ellos se construyeron edificaciones de tierra y adobe, por lo cual han perdurado pocos restos. Esta antigua ciudad es considerada como el primer elemento arquitectónico planificado en el México antiguo. En los alrededores de La Venta se han encontrado vestigios culturales muy antiguos, aunque la ocupación principal se concentra entre el 1200 y el 400 antes de Cristo. La Venta cuenta con la pirámide más antigua de Mesoamérica.
El centro ceremonial de Tres Zapotes fue el último en desarrollarse. Es el más conocido porque fue el que sobrevivió hasta una época más cercana, pero la civilización olmeca que se desarrolló aquí fue una cultura ya en decadencia.