Antes que nada queremos dejar claro que los comportamientos de sospecha y paranoia deben ser consultados con un especialista. Ya que se trata de un estado mental que puede estar en diferentes fases es necesario recibir el mejor tratamiento medico posible cuanto antes para determinar el nivel exacto.
Hace tiempo que quería escribir un artículo sobre este tema. Tengo varias personas cercanas que sufren de esta dolencia y la verdad que es un calvario tanto para ellos como para las personas que están en su círculo más cercano.
Todo se agravia cuando se producen los brotes de paranoia, las situaciones de desconfianza, los momentos tensos, los cambios de humor repentinos… No es una cosa agradable pero no se debe dar la espalda y debemos intentar estar al lado de la persona que lo sufre.
Como se suele decir muchas veces, el primer paso para curarse es darse cuenta de que existe un problema pues empezaremos a hacer lo posible para buscar una solución. En el caso de evitar la sospecha y la paranoia se debe buscar información sobre esta enfermedad para que nos pueda ayudar a comprender las causas y en que forma puede afectar. Los primeros síntomas que suelen darse son la inseguridad en uno mismo, los celos hacia las demás personas que carecen de toda lógica, se buscan los dobles sentidos y se le buscan otros significados a las palabras que nos dicen; incluso nos sientan mal las pequeñas bromas o chistes que hagan por insignificantes que sean; podemos llegar a desconfiar de todo el mundo, etc.
Antes de que se llegue a ese extremo en el que se desconfía de las personas, si ves que padeces varios de los síntomas arriba descritos o conoces de alguien que muestre esos síntomas ve al médico o coméntaselo. Curar la paranoia y la sospecha requiere mucho tiempo pero debes saber que no estas sólo a pesar de lo que puedas llegar a pensar.