Las mujeres siempre desean tener un buen aspecto allá donde vayan y para ello resaltan sus virtudes y ocultan sus defectos. Por lo tanto un buen maquillaje es básico para que una mujer luzca bella allá donde vaya. En cuanto al maquillaje de ojos las distintas fisonomías femeninas hacen que no haya una regla estricta para cada rostro. Cada maquillaje debería tener en cuenta las propias facciones para ser totalmente eficaz. Vamos a ver algunos pequeños trucos para maquillarse teniendo en cuenta la forma o el tamaño de los ojos.
En el caso de ojos pequeños lo ideal es maquillarlos para que parezcan más grandes. Para ello aplicaremos sombras de colores profundos, dando al ojo una forma de almendra desde el centro del párpado hasta el ángulo externo. En el fondo utilizaremos sombras claras y brillantes.
Para ojos muy redondos el objetivo a conseguir es una mirada rasgada. Para ello emplearemos colores pálidos sobre el fondo del párpado. Para la parte interna y la ceja recurriremos a sombras oscuras. Los colores claros los reservaremos para la parte restante entre las pestañas y la línea interior del párpado.
Si nos encontramos ante unos ojos un poco hundidos habremos de maquillarlos para que la mirada resalte sobre este detalle. Lo primero que haremos sea usar sombras brillantes en el párpado móvil. Las oscuras las reservaremos para crear líneas internas falsas sobre el párpado.
Si se diera el caso de que los ojos estuvieran demasiado separados, lo que hemos de conseguir con el maquillaje es que nuestra mirada parezca más centrada. Para ello dibujaremos las cejas lo más juntas que sea posible, y a continuación aplicaremos sombras cerca de la nariz, reservando las sombras más claras para el extremo del ojo.
Para ojos que resulten ‘saltones’ lo mejor es dotar a la mirada de profundidad. Por ello aplicaremos sombras claras bajo las cejas. Las sombras oscuras las reservaremos para la línea interna del párpado.