Rutina semanal para cuidar los pies

Los pies sostienen nuestro peso corporal, siendo responsables de nuestro caminar, haciéndolo sin ninguna dificultad, lo que hace que olvidemos su presencia, descuidándolos al no brindarles algún tipo de tratamiento de belleza o masajes relajantes que bien los necesitan constantemente. Por lo general solo los enjabonamos rápidamente, cortamos nuestras uñas y nada más.

Es muy importante aplicar un tratamiento rutinario y simple para cuidar nuestros pies y que permanezcan en buen estado, no necesitando ser aplicada diariamente, con hacerlo semanalmente será suficiente, en donde procederemos a atender los pies, de paso estimulando la circulación sanguínea en la zona, eliminando todas las asperezas de las células muertas acumuladas en la piel y aliviando malestares con debidos masajes.

Esto debe realizarse al finalizar el día. La forma de hacerlo es despojándose primeramente de los calzados, para mover libremente los dedos, girando los pies en el aire, desde los tobillos. También puede masajearlos con suavidad para ir relajándolos y caminar descalzos, en especial sobre superficies blandas como lo serían por ejemplo en la arena o en el césped, además es bueno que por la noche, dentro de casa camine descalzo o utilizando pantuflas confortables.

Incluya en su rutina de cuidado un baño de pies con agua tibia en una bañera o usando alguna palangana. Puede agregar al agua aceites de esencia o sales que sean relajantes. Una vez que el pie se encuentre sumergido en el agua tibia puede mover los dedos y los tobillos para estimular la buena circulación sanguínea. Si usted tiene problemas de circulación ya sea por estar sentado mucho tiempo durante la semana, es bueno alternar baños fríos y calientes para reactivar el flujo sanguíneo en sus pies.

Las esencias relajantes recomendadas para el baño de los pies son la salvia, la lavanda, el romero, al igual que el zumo de limón para mejorar la circulación o la mostaza en grano o molida. Estos baños pueden realizarse por un periodo de entre 10 a 15 minutos, aprovechando el momento para eliminar la piel muerta de los talones, con la ayuda de una piedra pómez para una sencilla limpieza. Posteriormente, para reforzar el cuidado de la piel de sus pies, unte alguna crema nutritiva e hidratante de su preferencia. Levante los pies para disminuir la hinchazón en caso de que ésta esté presente.

Un cuidado diario de los pies incluye la utilización de calcetines y de talco pédico para evitar la aparición de los molestos hongos, el cual debe aplicarse tanto en los pies, como dentro del calzado.

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Categorias: Belleza
Ultima modificación: 10/07/2013