La crema de leche se conserva en buenas condiciones, dentro de la fecha de vencimiento o caducidad, debiendo ser mantenida dentro de la heladera o refrigerador. Pasada esa fecha, no es conveniente consumirla y debe ser desechada.
Para que dure más tiempo o si desea conservarla mejor, puede congelar la crema de leche en su envase original o incluso podría guardarlas en porciones pequeñas con la ayuda de la cubetera de hielo, una vez congelada la crema de leche, se pueden retirar con cuidado los cubos congelados de la crema y almacenarlos en una bolsa de plástico para congeladora, utilizando los cubos paulatinamente y de esta manera sólo descongelar la cantidad que necesitemos y no todo el envase, si es que esto no se requerirá.
Una sugerencia es utilizar el freezer en lugar de la congeladora del refrigerador, para evitar cualquier tipo de problema como el corte en la cadena de frío, lo que suele suceder al abrir y cerrar la puerta de la heladera varias veces al día. Lo único que debe tenerse en cuenta es el colocar el cubo o cubos, de crema de leche a utilizar en la heladera, justo en el día en que lo vaya a necesitar, de esta forma se logra que se descongele en frío y no a temperatura ambiente, pues así podría correr el riesgo de cortarse ante el cambio muy brusco de temperatura. No volver a introducir al freezer esa porción utilizada después de descongelarla pues ya perdió su cadena de frío.