Si quiere sorprender a sus amigos con un plato delicioso y espectacular el flambeado es la opción perfecta. Sin embargo el flambeado es una técnica que debe tomarse con mucha precaución ya que no está exenta de riesgos. Por ello es fundamental seguir unos pasos que nos permitan hacerlo de forma correcta.
El flambeado consiste en rociar una preparación con una bebida alcohólica de alta graduación a la que se prende fuego. De esta forma el alcohol se evapora y su sabor queda impregnado en la comida.
Las bebidas más utilizadas para el flambeado son el coñac, el brandy, el ron y el whisky. Esta técnica resulta apropiada para platos rápidos cuando no hay tiempo suficiente para reducir el alcohol de una salsa de forma habitual. Pero esta técnica puede ser peligrosa ya implica una llamarada de fuego pudiendo provocar serios inconvenientes, para evitar eso hay que tener en cuenta algunos consejos.
Primero hay que asegurarse de tener apagada la campana extractora. Luego pondremos la bebida alcohólica en un cucharón, encenderla y ya con la llama colocarla en la cazuela.
Como precaución recuerda no agregar nunca licor desde la botella sobre la llama, ya que salvo si se es un profesional el resultado puede provocar como mínimo un buen susto.
Hay que tener en cuenta que el alcohol no se encenderá a menos que esté caliente, y se apagará demasiado pronto si no se revuelve constantemente.
Para que el fuego trepe a la sartén y se mantenga deberá ejecutar un movimiento rápido acercando ligeramente el sartén al mechero.
Por último no olvide tomar todas las precauciones debidas y tener a mano elementos que sofoquen el fuego como un extintor y por si acaso el número de los bomberos. Si sigue estos pasos podrá disfrutar de su flambeado tranquilamente.