Ingredientes
250 gramos de harina
3 huevos
1 taza de leche
5 cucharadas de mantequilla (fundida)
1 pizca de sal
Preparación
En primer lugar batiremos los huevos y le agregaremos una pizca de sal. Cuando los huevos estén bien batidos agregaremos la taza de leche poco a poco y seguiremos batiendo para que se integre todo. Ahora, agregaremos las cinco cucharadas de mantequilla fundida a la mezcla y seguiremos removiendo para que todos los ingredientes se mezclen. Por último, agregaremos lentamente la harina para evitar que se formen grumos. No dejaremos de remover la mezcla en todo momento para evitar que esto ocurra ya que de quedar grumos luego a la hora de comer nos encontraremos con harina cruda en la masa la cual es bastante molesta. Dejaremos en reposo la mezcla durante 20 minutos.
Una vez que haya transcurrido dicho tiempo, en una sartén antiadherente calentaremos un poco de mantequilla y la extenderemos con la ayuda de una servilleta para evitar que se pegue la masa a la sartén. El fuego siempre estará al mínimo, esto es importante para que la masa de la crepa no se queme.
Con la ayuda de un cazo extenderemos un poco de la mezcla en la sartén y tendremos mucho cuidado de que la mezcla cubra ligeramente toda la base de la misma para que esta se haga perfectamente. Cuando los bordes estén cocidos, con la ayuda de una paleta de cocina levantaremos y usando las manos la voltearemos. De esta forma evitaremos que se rompa. Sólo nos faltará emplatar y rellenar nuestras crepas con aquello que más nos guste.