Cómo hacer un disfraz de Chucky

A pesar de los años que han pasado desde la primera película, el fatal personaje de la saga diabólica “Juego de niños” sigue causando furor aún hoy en día como inspiración para disfraces en todas las épocas del año. Tal vez el hecho de que podamos realizarlo con elementos sencillos o reutilizar ropa de nuestros armarios lo ha convertido en un modelo recurrente y popular.

En primer lugar, deberemos teñir de rojo nuestros cabellos con un tinte no permanente, laca colorante o conseguir una peluca pelirroja.

La indumentaria del personaje se completará con un mono o peto vaquero, sobre el que podemos repetir con rotulador especial para textil de color rojo los motivos que lucían las ropas del muñeco en la película, así como algunos dibujos infantiles.

Vestiremos bajo esta prenda una camiseta de manga larga con rayas horizontales de colores y el calzado escogido pueden ser zapatillas o zapatos, según la disponibilidad de nuestro ropero. Otro elemento que puede completar nuestro disfraz es un hacha  de plástico o simulada.

Del mismo modo, si queremos conseguir un estilismo más aterrador, similar al de las entregas finales de la saga, deberemos reproducir con maquillaje las terribles cicatrices del rostro. Con una base de aspecto amarillento o blanquecino, remarcaremos la base de los ojos y realizaremos unas cicatrices pegando una mezcla de cola y papel higiénico para simular estas heridas. Una vez seca la mezcla, podemos completar su aspecto con sangre simulada o algunos efectos de maquillaje con sombras preferentemente negra, verde y pintalabios de color rojo.

 

 

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Categorias: Disfraces
Ultima modificación: 12/21/2012