El disfraz de sirvienta, inspirado en modelos refinados franceses o anglosajones, permite varios niveles de picardía y atrevimiento, por lo que resulta la base de distintos estilismos más o menos sensuales.Ya sea en halloween, carnaval o celebraciones privadas, con este disfraz conseguiremos hacer que suba la temperatura en la sala si esa es nuestra intención. La base del aspecto profesional reside en un vestido corto de color negro, o combinar una falda y una camisa de manga corta, ambas de color negro. La longitud de la falda y el corte de la camisa contribuyen a definir el tipo de mucama que representamos.
Los elementos definitorios del atuendo de trabajo son un delantal blanco rematado con puntilla en los bordes, que puede llevar peto o no, y una cofia o tiara que se dispone sobre la cabeza una vez recogido el cabello con un moño y horquillas.
Resulta interesante completar el disfraz con medias negras y zapatos de tacón medio o bajo de color negro. Recordemos llevar unos guantes de hilo blanco. Un plumero, un paño de limpieza o una bandeja redonda de metal son elementos que enriquecen la apariencia final. El maquillaje muy suave o la cara lavada, acorde con la imagen profesional del personaje.
Si queremos un aspecto más sexy, podemos optar por una minifalda o un vestido muy corto, bajo el que vestiremos unas medias con liguero o unas medias de rejilla. Las medias blancas son una opción diferente. El zapato de tacón más alto favorece un aspecto sofisticado y sensual. Si usamos una blusa con ligera transparencia, reducimos las dimensiones del delantal y usamos un maquillaje sofisticado, completaremos este look más atrevido. Podemos usar también algún elemento anudado al cuello en caso de que luzcamos escote.