Sin duda, la serie Dragon Ball constituye una de las epopeyas gráficas niponas más conocidas y añoradas. Cualquiera de sus personajes tiene infinidad de seguidores por sus cualidades y aspecto impresionante. Si eres uno de esos incondicionales admiradores de la saga y no sabes qué disfraz escoger para la ocasión que se te presenta, tal vez sea el momento ideal para que repases alguna de las lecciones de artes marciales que tienes abandonadas y prepares un look que te haga revivir ilusiones juveniles.
El disfraz de Vegeta puede ser también de super-guerrero, aunque en este caso deberemos realizar una peluca adecuada al aspecto final del personaje. Sin duda, el elemento fundamental del traje es la armadura, que podemos crear con cartón, gomaespuma, pintura, una camiseta blanca y pegamento para textil. Otros elementos indispensables son: una camiseta azul marino de manga larga, un pantalón azul marino y unas botas blancas.
La versión más antigua de armadura presentaba unas hombreras de aspecto triangular, que podemos recortar en el cartón y pegar sobre la camiseta blanca. Primero habremos cortado las mangas para que se adapte por encima de la camiseta azul simulando ser una coraza. Las hombreras pueden forrarse con tela amarilla o pintarse del mismo color. Traza tres rayas paralelas en cada hombro para conseguir un acabado fidedigno. Pintaremos las líneas de la armadura sobre la camiseta blanca y podemos pegar algún trozo más de cartón pintado de blanco para reforzar la sensación de volumen.
El peinado es muy importante. Recuerda usar gel fijador fuerte y peinarte dejando el pelo de punta. Otros detalles que puedes incorporar son: la cola de simio, que puede ir anudada a la cintura, un reloj futurista o un localizador artesanal anclado a una de las orejas.