El papel de seda se utiliza para embellecer la bolsa en la que vaya metido el regalo. Buscaremos siempre un tamaño de papel mayor que el de la bolsa, para que sobresalga y luzca bien. Tampoco debe sobresalir en exceso porque si ya pierde ese toque discreto y bonito a la vez. Si apreciamos que el papel de seda sobresaldrá en exceso cuándo lo pongamos dentro de la bolsa, le quitamos un par de centímetros o tres utilizando las tijeras. Podemos escoger el color que queramos de papel pero uno de ellos ha de ser blanco para que la combinación de colores quede bonita. El papel de color debería ser de un tono parecido al de la bolsa o al del envoltorio del regalo.
Para colocar los papeles de seda de manera vistosa, ponemos uno encima del otro en diagonal, de manera que veamos las cuatro esquinas del papel que esté debajo, levantamos el papel de una esquina, ponemos una mano por debajo y con la otra por arriba cogemos los dos papeles y los sacudimos un poco, le damos la vuelta al papel (se verá que parece una especie de ramo de flores) y lo colocamos dentro de la bolsa. De esta manera veremos que queda una forma bonita y que alterna picos de color y blancos.
Si queremos ponerle tres papeles, se podría hacer igual, los colocaríamos en diagonal de manera que podamos ver todos las esquinas y repetiríamos el mismo procedimiento. Así mismo, si creemos que es necesario recortar un poquito para que no sobresalga en exceso el papel, podríamos hacerlo con tijeras que dejen líneas curvas al cortar.