Principales riesgos del trabajo de policía en España

Ser policía es una profesión dura y exigente. Aunque los riesgos varían dependiendo de los distintos cuerpos de policía y dentro de cada cuerpo de las funciones de cada puesto, en general se puede decir que los policías están expuestos a dos tipos de riesgos. Están expuestos a riesgos físicos al ir armados y enfrentarse con frecuencia a situaciones violentas, pero también lo están a riesgos psicosociales. Los policías tienen más probabilidades de sufrir trastornos del sueño y sufren más enfermedades psicológicas.

Entre los principales riesgos físicos destacan los accidentes automovilísticos, porque pasan muchas horas en la carretera, estar expuestos en ocasiones a incendios, enfrentarse al ataque de personas violentas y los incidentes con armas.

Los candidatos a policía deben superar pruebas que evalúan su estado mental. Pese a esto, las condiciones laborales de los policías son tan duras que las enfermedades psicológicas se colocan entre la segunda o tercera causa de enfermedad laboral en este sector. La ansiedad y la depresión son las más habituales, pero también el estrés post-traumático.

Los policías trabajan habitualmente en turnos prolongados que les provocan fatiga e insomnio. Ambos factores se asocian con un mayor riesgo de errores, lesiones no intencionadas y accidentes automovilísticos entre otros. Teniendo en cuenta la naturaleza del trabajo de los policías, esto es especialmente peligroso.

Un dato no muy conocido pero preocupante es la alta tasa de suicidios entre los policías. En España, en la Policía Nacional el índice de suicidios es diez veces superior a la media y en la Guardía civil diecinueve veces superior a la media de la población.

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Categorias: Profesiones
Ultima modificación: 07/12/2012