Cómo embalar objetos de arte

Los objetos tridimensionales, como pinturas y otros, se deben envolver primero en un material protector, asegurándose que nada quede adherido a su superficie (por ejemplo, tenga cuidado con la tinta de los papeles de d ¡ario j. En segundo lugar, hay que usar una capa rígida de cartón corrugado, y por último cubrir todo el exterior con una envoltura de polietileno.

De ser deseable una mayor protección se recomienda utilizar un contenedor de madera, dentro del cual se coloca el objeto. Es importante comprar una caja que sea unos 10 em más grande en todas las dimensiones, de modo de prevenir que -al clavar la caja- se dañe el objeto. Además este hueco conviene rellenarlo. La caja debe ser suficientemente fuerte para que no se desarme al levantarla de una orilla, y suficientemente grande para dejar espacio al material de relleno puesto alrededor del objeto. De esta forma, la pieza resistirá los golpes y vibraciones propias del transporte. Como regla general, el objeto no debe tocar directamente ninguna de las superficies del contenedor. La madera aglomerada es el material más atractivo por resistencia y adaptabilidad.

Al usar envolturas de polietileno directamente sobre el objeto, sin un material intermedio absorbente, existe el peligro de que se produzca condensación sobre la superficie. Como material dc rellcno y para absorber golpes se recomienda usar corcho, burbujas de polietileno. cintas de polietileno. Las tiras de papel no son recomendables aun cuando protegen bien, pero capturan polvo con facilidad y carecen de resistencia a los hongos.

Otra alternativa es hacer otra caja dentro de la caja, colocando entre ellas resortes y afirmando con corcho, o llenando el espacio con cojines de poliéster o burbujas de polietileno en grandes cantidades. De todos modos, dentro de la segunda caja debe colocarse material de relleno para proteger el objeto.

Un embalaje clásico está constituido por:

  • madera (o cartón corrugado), cinta de polietileno
  • madera prensada (cholguán)
  • y aislapol para absorber golpes.

En el exterior de la caja hay que indicar mediante una flecha la orientación correcta para ubicar la caja. No olvide asegurarse de que la dirección del destinatario esté correcta y bien visible.

Al embalar varios objetos en una caja grande cuide que cada uno de el los tenga su envoltorio protector individual, y no poner materiales de relleno entre objetos. Los distintos niveles en que se ubiquen los objetos deben estar separados por cartones rígidos, tomando la precaución de ubicar los objetos más grandes y pesados en la parte inferior.

Al usar cajas, es bueno colocar varillas en la base, de modo de proteger al objeto cuando se coloque al fondo: además protege el objeto de la posible humedad del suelo. Las cajas de cartón sólo se recomiendan para traslados cortos, pues no es un material muy firme.

Si las cajas se transportan en un camión, tome la precaución de colocar al fondo de éste un colchón o frazadas para prevenir el electo de golpes, y al otro lado afirmar con soportes de madera inclinados, los cuales se afirman entre la pared de la caja y contra un madero bien pegado al suelo del camión.

Cuadros

En el caso de los cuadros, deben usarse cojines que sirvan de amortiguadores sobre las esquinas que están más expuestas a recibir golpes. El sistema de colocar los cuadros api lados no es bueno: lo mejor es colocarlos verticalmente. con protecciones separadas. Los cuadros, dispuestos en bandejas verticales dentro de una caja, deben rodearse adecuadamente de materiales que absorban los golpes (espuma plástica), especialmente en las esquinas y en los lados.

Esculturas

Los objetos de formas irregulares, como las esculturas, deben estar sujetos a la caja exterior mediante bandejas especiales que tienen la forma exacta del objeto y que están ubicadas a distintos niveles. Así se logra fijarlos completamente. La escultura debe envolverse exteriormente con un material suave y no adhesivo. Las cuatro paredes requieren cojines de protección contra golpes (que pueden ser de espuma plástica o algodón). El objeto se puede envolver, por ejemplo, en poliestireno que se ha cortado previamente al tamaño requerido.

Cerámica

Las cerámicas y otros objetos frágiles deben llevar, además de las protecciones exteriores de la caja ya mencionadas, un relleno de polietileno. material limpio y reutilizable, con excelentes propiedades de amortiguación y de aislación térmica. Desgraciadamente, el poliestireno tiene escasa capacidad de resistencia a la humedad.

Cuero

El cuero, si es flexible, debe enrollarse en un tubo de canon, y nunca doblarse, porque siempre queda la marca, causando un daño irreversible.

Metales

Deben embalarse en cajas herméticas para impedir que la humedad del ambiente llegue al metal. Como precaución adicional es preciso colocar dentro de la caja bolsitas plásticas con hoyos conteniendo Silica Gel en proporción lkg/m. Otra posibilidad es construir, en una de las paredes, una red de metal o plástico detrás de la cual se pone el Silica Gel. Para embalar objetos de metal no es útil usar envolturas de plástico, porque éstas inevitablemente producen condensación y. por ende, corrosión. Incluso algunos plásticos hechos de cloruro de polivinilo dañan al metal.

Textiles

Para transportar un textil plano hay que enrollarlo en un tubo de cartón, luego envolverlo en papel de seda, algodón o lino. Si se trata de un vestido, hay que tratar de doblarlo lo menos posible, y en los pliegues que resulten inevitables, colocar rollos forrados de algodón para suavizar y evitar las marcas.

Mármol

Para embalar un objeto de mármol no se puede usar nada que tenga color, como papel de diario o paja, porque si se humedece el envoltorio se manchará la superficie del mármol. Hay que embalar en una caja de madera especialmente construida para el efecto, cuyas paredes tengan estructuras de madera forradas con polietileno. La caja se debe construir con clavos de latón. El objeto se envuelve muy bien con algodón.

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Categorias: Arte
Ultima modificación: 06/22/2012