Nacer con talento es un don, nacer con voluntad es una ventaja. Por eso el aprendizaje musical es más una cuestión de constancia, que de aptitud. Por este motivo es tan importante la existencia de academias e instituciones que se dediquen a la enseñanza de esta modalidad artística.
En este sentido, San José, en California, Estados Unidos, destaca por la multiplicidad de opciones que presenta para los interesados en desarrollar o mejorar sus habilidades musicales como intérpretes o instrumentistas.
La Facultad de Humanidades y Artes, en la Universidad Estatal de San José ocupa el primer lugar en la ciudad para los interesados en cursar estudios sobre arte. Posee una prestigiosa trayectoria en la formación de músicos, compositores y académicos dentro de la rama, así como un amplio programa de formación musical.
Destaca la instrucción orquestal, cuyo mejor exponente es la SJSU Symphony Orchestra, que constituye un reto al desempeño de los estudiantes y a su capacidad para crear nuevos repertorios. La instrucción en la modalidad jazzística , abarca el estilo de orquesta, afro-latino y los combos, con oportunidades especiales para que los estudiantes se presenten en diversos escenarios. Por último, la facultad incluye una exquisita enseñanza coral.
Además de la institución estatal, San José ofrece un rico panorama de instructores profesionales privados, a los que pueden acudir todas las personas interesadas en la música.
Deborah Levoy se encuentra actualmente entre las profesoras más requeridas en la ciudad debido a la amplitud de servicios que brinda en sus clases, las cuales incluyen el canto, la composición, el perfeccionamiento de las habilidades performáticas de los estudiantes y la guitarra. Además sus estudiantes refieren con satisfacción el carisma natural que posee, tan importante para el proceso de aprendizaje de sus discípulos.
Otra de las opciones, esta vez en la interpretación del piano, son las Lecciones para piano, de Michael Eldridge. Luego de más de 30 años impartiendo estas clases y acercando a nuevas personas al conocimiento de este clásico instrumento, Eldridge afirma en su sitio digital, que la música forma parte del ser humano, pero hacerla nos enriquece profundamente pues permite expresar algunas cosas que no es posible decir de otra manera.
Algunos de estos estudios privados, se dedican de manera especial al trabajo con los niños, como por ejemplo Willow Glen Music School y The Music Place. Ambas muestran atractivas opciones para que los niños aprendan a cantar o tocar algún instrumento. Así, de paso, descubren que el arte también puede ser un rato divertido.
Numerosas opciones para que el talento y la constancia se transformen en un hermoso espectáculo musical, para deleite de San José o de cualquier ciudad del mundo.