Cómo restaurar y conservar monedas

Monedas de Plata

La capa de sulfuro de plata es principalmente superficial y al limpiarla queda impecable y no deja rayas. Especial para la limpieza de monedas de plata que sólo presentan suciedad es el producto Silvo., un líquido en el que se sumerge la moneda con una pinza de plástico, ya que una pinza metálica la rayaría. Después la moneda se lava bajo un grifo de agua corriente por 5 minutos. La moneda no puede estar sumergida en Silvo más de 5 minutos.

Si no puede conseguirse el producto Silvo, también puede limpiar la pieza de plata lavándola en agua con un detergente suave, y secarla con un paño suave, con papel o exponiéndola a la luz infrarroja. Antes de guardar las monedas o medallas, es preciso limpiarlas con un algodón empapado con algo de bencina de modo de protegerlos de la humedad. La pátina azulada de la plata no debe sacarse debido a su naturaleza protectora y a que señala la antigüedad de la moneda. Si la moneda de plata presenta suciedad muy profunda, puede colocarse en un baño de agua con un 10% de amoníaco, pero luego hay que lavar y secar muy bien la pieza para evitar daños.

A veces las monedas de plata presentan daños por corrosión, y al eliminar el producto de ésta es posible encontrarse con que puede haberse dañado la imagen representada en la moneda. Aquellas monedas de plata que presenten alto grado de corrosión más vale dejarlas así, porque puede ser que quede muy poca plata. En ciertas ocasiones es mucho más fácil leer una moneda con óxido, que después de limpiada.

Monedas de Oro

Se limpian con un baño de agua con detergente suave, se pasan por el agua corriente del grifo y se secan. Como puede verse en el capítulo dedicado al oro. éste no es un material que se dañe muy fácilmente, salvo por motivos mecánicos.

Monedas de Bronce

La corrosión se saca con un bisturí o trozo de madera que en la parte superior tiene un metal con tres ángulos. Esta herramienta se utiliza sólo hasta llegar a la imagen. Es preciso emplear una lupa de 10 aumentos. Es problemático cuando en una excavación las monedas aparecen adheridas unas a otras, pues no es posible emplear Komplexon 111 o ácido cítrico, porque estos productos también disuelven los óxidos de la aleación de cobre. Estos óxidos generalmente forman parte de la imagen o leyenda que se presenta en la superficie de la moneda. Para estos casos se recomienda usar una emulsión, a una temperatura de 45 grados Celsius. de un 10% de hidróxido de sodio, 2% de glicerina y 2% de Karium F. En esta solución se ponen las monedas y puede acelerarse el proceso usando efectos de ultrasonido. Para sacar los productos químicos se utiliza una solución de agua con un 2% de soda cáustica, usando agua fría y agua caliente alternativamente, proceso que se repite varias veces.

Monedas de Bronce y Cobre

Estas monedas pueden meterse por algunos segundos en un líquido formado por un 5% de ácido nítrico y agua, pero hay que destacar que este sistema es riesgoso pues fácilmente el ácido ataca la moneda. Se lava la moneda muy bien bajo un grifo de agua corriente. Acaso sólo una parte de la moneda esta afectada, se protege la parte sana con cera de parafina o con grasa. Después del tratamiento es bueno agregar lanolina o cera microcristalina para proteger la moneda.

Monedas de Plomo o Lata

Estas monedas son delicadas y es conveniente colocarlas dentro de un marco de Thermoplast o resina de poliéster. Posteriormente puede retirarse la moneda del marco aplicándole cloroformo para disolver la resina.

Monedas de Aluminio

Sólo pueden mantener el brillo original colocándole un barniz protector.

Monedas de Estaño (y Plomo)

Estas necesitan un tratamiento muy cuidadoso porque es fácil que se raye el estaño. El plomo es muy sensible a la humedad o a la presencia de cualquier objeto húmedo o descompuesto alrededor, lo que puede causar que este metal se deshaga. No debe sacársele la pátina pues este proceso es irreversible y torna al objeto más indefenso frente a posibles problemas. Lo anterior ocurriría si se galvaniza nuevamente la moneda, perdiendo la pátina y, aunque parecería nueva, habría perdido su valor como objeto de colección.

Al tratar monedas encontradas en excavaciones frecuentemente se pierden sus imágenes. Debido a esto recomiendo que cuando se requiera intervenir por razones estéticas, en vez de dejar la moneda con Silica Gel. realizar lo siguiente: trabajar con una lupa de 10 aumentos, raspar con suavidad hasta llegar a la imagen y en ese momento suspender el raspado y colocar un barniz protector. Gracias a este barniz la moneda se conservará y no se dañará más la imagen que posee gran valor. Antes de iniciar el trabajo de raspado de monedas es conveniente ensayarse con una lata de autos.

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Ultima modificación: 06/22/2012