Ventajas y desventajas de ahorrar dinero a largo plazo

Si hemos sido capaces de mantener cierto capital a salvo de la inestabilidad económica actual, resulta lógico que estemos considerando la opción de que sea ahora el dinero quien trabaje para ti. De forma tradicional, la inversión en productos a largo plazo ha sido una de las opciones más utilizadas por los pequeños ahorradores e inversores, aunque como sucede con todas las opciones a nuestra disposición, esta elección conlleva ciertas ventajas y desventajas.

En primer lugar, una de las ventajas más claras es que, cuando contratamos un producto a largo plazo, la seguridad para nuestro dinero es mayor. En primer lugar, porque la entidad debe proteger nuestro dinero ante cualquier eventualidad, y en segundo lugar, porque estas opciones están protegidas por el Estado hasta un máximo de cien mil euros. Una forma de blindar nuestro dinero es que, si tenemos un capital superior a la cantidad ya enunciada, podemos repartir este dinero entre varias entidades.

Las desventajas están relacionadas con la pérdida de liquidez del ahorrador si decide establecer cuentas de ahorro o establecer depósitos a largo plazo pues, en caso de necesitar el dinero, deberá afrontar una serie de penalizaciones y comisiones, que si son en un plazo inferior al pactado, harán disminuir la cantidad aportada antes de generar beneficios. Por el contrario, en caso de decidir guardar nuestros ahorros en casa, corremos varios peligros: la posibilidad de sufrir un robo y perder de esta forma el fruto de nuestro ahorro, la nula generación de beneficios al no tener un depósito bancario y la tentación de gastarlo en períodos de crisis económica o de necesidad.