Las ranas adultas ponen huevos pero lo que emerge de un huevo no es una rana sino un renacuajo que posteriormente se desarrollará en rana adultas a través de un proceso llamado metamorfosis. Un renacuajo es considerado la larva de una rana.
Los renacuajos se transforman de su estado inicial a pequeñas ranas llamadas ranitas haciendo crecer extremidades inferiores, antebrazos y perdiendo la cola que tienen como renacuajos, todo en ese orden. Con el paso del tiempo desarrollan dientes, una lengua y piel más gruesa. Sus ojos se vuelven más prominentes y la forma de su cuerpo también cambia hasta convertirse en ranas perfectamente formadas.
Una hormona llamada tiroxina es la que dispara la metamorfosis, y una vez que esto ocurre, le puede tomar a un renacuajo que se transforma en una rana adulta entre 2 y 5 meses para hacerlo, dependiendo de la especie de la cual se trate.
Los renacuajos no sólo cambian su forma externa al convertirse en ranas sino también su estructura interna. Por ejemplo, los renacuajos comen plantas mientras que las ranas son carnívoras, así que el sistema digestivo de un renacuajo también se transforma para adecuarse a digerir más proteínas.
La cola de un renacuajo no se cae como comúnmente se cree. En lugar de ello, la cola se absorbe en el cuerpo.
Cuando un renacuajo nace, puede vivir y respirar debajo del agua hasta que pierden sus branquias y desarrollan pulmones para poder respirar fuera del agua y únicamente oxígeno del ambiente.