Un tanque subterráneo es un tanque que principalmente se utiliza para almacenar petróleo y otros productos y tiene 10% o más de su masa total enterrada bajo tierra. Estos tanques están hechos regularmente de acero o aluminio, aunque los desarrollos en los materiales mixtos han mejorado la construcción de tanques subterráneos y han hecho que tengan menos probabilidades de oxidarse o de presentar fugas. La Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos ha regulado el uso de tanques de almacenamiento subterráneos para propósitos comerciales. Las legislaciones actuales dicen que el agua del subsuelo tiene que ser monitoreada alrededor del perímetro de los pozos para verificar cualquier fuga que pueda contaminar el manto de agua.
Cuando una persona compra gasolina en una gasolinera, no se puede percibir el enorme tanque de almacenamiento subterráneo que contiene toda la gasolina. Estos grandes tanques por lo regular contienen desde algunos cientos de galones hasta decenas de cientos de galones de producto. Aunque son principalmente usados para el petróleo, los tanques de almacenamiento subterráneos pueden contener cualquier tipo de líquido.
Algunos hogares rurales también pueden hacer uso de pequeños tanques de almacenamiento subterráneos para contener combustible para un equipo de cultivo.
Debido a la característica de los tanques para oxidarse y degradarse con el paso del tiempo, muchos tanques han contaminado el suelo y las aguas subterráneas. Algunos métodos de detección pueden equiparse en el momento de la construcción del tanque de almacenamiento subterráneo aunque algunas veces la única manera de determinar si existe o existió una fuga es instalando pozos de monitoreo alrededor del área.