¿Qué causa el Ombligo sangrado?

La infección en el ombligo, denominada onfalitis , es un problema bastante frecuente en los adultos. Sus síntomas suele ser enrojecimiento, hinchazón, mal olor, exudación y en la mayoría de los casos su origen se encuentra en una higiene defectuosa.

El ombligo es la cicatriz que queda tras la rotura del cordón umbilical en el bebé. Esta depresión de la piel también puede enfermar. La onfalitis del adulto suele ser localizada, de evolución lenta y crónica que generalmente se relaciona con la falta de una buena higiene. Asimismo, la onfalitis más conocida es la que presentan algunos recién nacidos que se produce por contaminación del cordón umbilical durante su sección o por deficientes cuidados postoperatorios.

Muchas veces los botones o tejidos de la ropa pueden irritar el ombligo y la zona que le rodea. Cuando el obligo nos molesta durante unos días, es importante acudir al médico para descartar otras anomalías y abordar cuanto antes el problema.

Los síntomas más comunes de la onfalitis son ombligo enrojecido, caliente, maloliente e hinchado (edematoso) por el que fluye un líquido e, incluso, en algunas ocasiones hasta pus o sangre.

El tratamiento consiste en una adecuada higiene del ombligo, junto con antibioterapia. Sólo en casos muy extremos se procede a un drenaje quirúrgico.

La presencia de una onfalitis recurrente en un adulto con una buena higiene del ombligo, debe obligarnos a descartar la existencia de una patología subyacente, generalmente un cierre incompleto del uraco, aunque pueden existir otras causas como quiste epidérmico, hernia umbilical, endometriosis, etc.

La uracosinus es una anomalía congénita poco frecuente del uraco, un conducto que comunica la vejiga con el ombligo del feto, y que, normalmente, se obstruye en el momento del nacimiento sin dar ningún problema a lo largo de la vida.

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Categorias: Medicina
Ultima modificación: 09/16/2013