En anatomía humana se establecen tres planos y tres ejes para describir los distintos movimientos humanos. Los planos son: sagital, horizontal y frontal. Los ejes son: frontal-horizontal, vertical y sagital-horizontal.
El plano sagital es el plano imaginario que pasa desde el frente hasta la espalda del cuerpo, partiendo el cuerpo en dos partes, una izquierda y otra derecha, que no tienen por qué ser iguales excepto en el caso del plano sagital capital. Este tipo de plano también se llama plano anteroposterior porque va de delante a atrás.
El plano horizontal también se llama transversal y es un plano paralelo al suelo. Divide el cuerpo en una parte superior y una inferior. Igualmente, aunque existen infinitos planos horizontales, solo el que divide el cuerpo en dos segmentos del mismo tamaño es considerado como plano horizontal cardinal.
El plano frontal se llama también plano lateral. Divide el cuerpo en dos segmentos atravesándolo de un lado a otro, dejando una parte delante y otra atrás. El plano frontal cardinal es el que separa el cuerpo en dos partes iguales.
Los ejes son líneas rectas y las rotaciones de las articulaciones se describen como alrededor de uno de estos ejes.
Protracción es el término anatómico para designar el movimiento de una parte del cuerpo hacia delante. Este término se opone al término retracción, que designa el movimiento hacia atrás. Protracción se usa con frecuencia para referirse a la tracción o salida hacia delante de la lengua o del maxilar. Se trata de un movimiento hacia delante, en un plano transversal y alrededor de un eje sagital-horizontal. El movimiento de retracción comparte plano y eje con el de protracción, pero se realiza hacia atrás.