Qué hacer para transferir la hipoteca a otro banco

Si estás cansado de ver cómo tu préstamo se mantiene en niveles elevados mientras mejoran de forma progresiva las condiciones que se ofertan en la actualidad, tal vez debas estudiar con detenimiento la posibilidad de subrogar la hipoteca y trasferirla a otra entidad donde consigas ventajas como una cuota con menores intereses o la anulación de comisiones. Es un proceso delicado, pero un buen análisis puede permitirnos ahorrar muchos miles de euros.

El proceso de subrogación de una hipoteca está regulado por la Ley 2/1994 de 30 de marzo, de modo que podemos analizar el marco legal para estar seguros de que no ponen impedimentos ficticios a una operación reconocida oficialmente. Esta operación puede suponer unos gastos o comisión de subrogación que por ley no pueden ser superiores al 0,5% del total del capital pendiente. Algunos bancos on line la ofrecen sin comisiones. Otros gastos son los de notaría, registro, tasación y gestoría, aunque la operación se traduce en un ahorro considerable cuanto más reciente sea la hipoteca anterior.

El primer paso debe darlo la nueva entidad, que debe trasladar una oferta vinculante al banco actual con las condiciones que nos ha ofrecido. El banco actual debe entregar en siete días al nuestro nuevo banco un certificado con las cantidades que restan por pagar. Sin embargo, cabe la posibilidad de que realice en un plazo de 15 días una contra-oferta que iguale o mejore la anterior para que nos mantengamos como clientes. En caso de no recibirla, pasado el plazo, se firmará ante notario la subrogación con el nuevo acreedor.