Ejemplos de surrealismo en la publicidad

Cabe decir que la corriente artística del surrealismo, surgida a inicios de siglo XX, ha sido la más influyente en el desarrollo de las técnicas gráficas de la publicidad comercial. La trasmisión de ideas subliminales y de imágenes con lecturas latentes, forma parte activa del arsenal de los diseños destinados a sugestionar al público con fines mercantiles.

Desde la paranoia crítica de Salvador Dalí hasta la yuxtaposición de imágenes en Rene Magritte, el surrealismo en su provocativo afán artístico cambió el paradigma de la vieja concepción publicitaria decimonónica.

La difundida idea de la sexualidad latente como gancho comercial, utilizada desde entonces cual poderoso medio de sugestión masiva, surge como una aplicación publicitaria directa de los conceptos surrealistas.

El sexo, placer por excelencia al alcance de una inmensa parte del público, se emplea como elemento asociativo prácticamente con cualquier producto, desde una loción para después de afeitarse hasta un motor fuera de borda.

Si a esto se suma la frecuencia difusiva de estas imágenes, obtendremos todo un efecto místico sobre el consumidor, muy parecido al que despierta la visión de una obra surrealista.

El empleo de técnicas como la cámara lenta y el trucaje de imágenes le permiten al comercial hacernos sentir tan ligeros como el aire (productos light), tan rápidos como un correcaminos (medios de transporte) o tan poderosos como leones (productos alimenticios y suplementarios)

No hay dudas de que el surrealismo, con sus dobles figuras mutuamente asociadas, escenas fuera de contexto y circunstancias que se burlan de la gravedad o del tiempo -para asombro de sus espectadores-, se reproduce a diario en nuestro universo visual mediante una infinidad de efectivos anuncios comerciales.

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Categorias: Marketing
Ultima modificación: 06/13/2012