Como escribir y dar un discurso

Si has llegado a este artículo con dudas respecto de si podrás escribir ese bendito discurso, recomiendo continuar leyendo para decidirte y ser el encargado de ponerle palabras a esos pensamientos entremezclados que serán el espíritu de tu discurso. Aprender a escribir un discurso es una tarea incompleta, ya que tu objetivo debería ser no sólo escribirlo, sino también darlo y conseguir que lo que has escrito en el papel llegue a quienes te escuchan de la manera que tú has querido cuando lo has escrito. Manos a la obra.

Para que aprendas de un modo práctico, lo haremos paso a paso:

1. Hay tres preguntas sin las cuales no podremos avanzar ni siquiera del primer renglón:

a) ¿Para quién escribirás?

b) ¿Sobre qué escribirás?

c) ¿Cuánto tiempo tienes para darlo?

2. Estructura del discurso: El formato básico de un discurso se estructura es el  siguiente:

Una introducción. La introducción son los párrafos en los que presentas aquello que te lleva a estar frente a esa audiencia.

El cuerpo del discurso. Es la parte verdaderamente importante del discurso. En el cuerpo del discurso desarrollarás la información que tienes para dar.

Un cierre. Ofrecerás una conclusion y agradecerás la atención que te ha sido dispensada

IMPORTANTE: Sin perjuicio de esto, y aunque pueda parecer extraño, el orden en el que escribirás el discurso es distinto a este: primero escribirás el cuerpo, luego el cierre, y por último la introducción. Esto permitirá dar la verdadera importancia a las partes de tu discurso.

3. Tener una respuesta para cada una de estas tres preguntas y conocer la estructura básica de un discurso te permitirá organizar tu discurso sin perderte en detalles sin relevancia y escribir sin perder de vista a tu audiencia, por eso lo principal es resolver a quién le escribes. ¿De qué manera deberías expresarte para que todos te entiendan? ¿Qué tipo de vocabulario deberías usar?

4. Comienza a escribir las ideas principales que pretendes transmitir.

5. Imagina que estás hablando con tu audiencia e intenta dar formato a esas ideas. Escribe tus pensamientos. No debes preocuparte por estructuras gramaticales impecables, ya que lo más importante es entregar el mensaje a tu audiencia del modo que ellos mejor lo entiendan.

6.  El cierre de un discurso tiene dos fines inmediatos: dejar una buena impresión en tu audiencia e integrar los temas que has atravesado durante el discurso. Piensa en un cierre y escríbelo sin perder de vista tu objetivo, pero sin preocuparte por su coherencia. Que no te detenga la redacción de una oración, luego, al releerla, podrás modificarla.

7. Prepárate para la introducción de tu discurso. Necesitas ganarte la atención de la audiencia, ¿qué estrategia te resultará mejor con esa audiencia? ¿Humor? ¿

8. El último paso es releer tu discurso en voz alta varias veces:

  • Verifica la extensión de tus oraciones
  • Verifica que has escogido palabras que todos podrán comprender
  • Comprueba que no se pierde el tema o los temas por lo que estás escribiendo
  • Comprueba que te mantienes dentro del tiempo con el que cuentas

Ha llegado el momento. Ten confianza, ya has hecho la parte más difícil: el discurso ya está escrito y los has leído cientos de veces. ¡Todo saldrá bien!

Sobre el artículo

Categorias: Educación
Ultima modificación: 07/04/2012