Cómo funciona el lenguaje de signos

El lenguaje de signos es gestual y visual, no es oral, no es auditivo y no es universal. Cada región tiene su lenguaje de signos propio, con características únicas, igual que el idioma hablado.

El lenguaje de signos no depende sólo de los signos para comunicar, la expresión gestual, la cultura y las costumbres aportan significados e interpretaciones particulares a cada signo.

El signo gestual con el que se comunican los sordos no cuenta con escritura pues la articulación gestual no se puede transcribir. El lenguaje de signos se ha creado espontáneamente y se desarrolla aunque no sea enseñado.

Los signos y gestos de los sordos son señales que comunican y tienen un valor lingüístico.

Desarrollo del lenguaje de signos

A partir de los ocho meses un bebé que escucha adapta los sonidos que hace para que coincidan con los sonidos que oye. El bebé imita y repite gestos y sonidos.

Un bebé que no escucha imita los gestos manuales significativos que ve realizar a sus padres. El bebé desarrolla su comunicación gestual y la adapta de acuerdo a lo que percibe.

El lenguaje de los signos fundamenta su interpretación en el sentido de la vista. Los signos hechos con las manos se complementan con la quinésica facia, la mirada, el ritmo del movimiento, la quinésica somática y dactilologíca.

Lenguaje de signos

Cuando se realiza una seña con las manos se realizan movimientos con los labios, no son palabras sino un componente auxiliar en la interpretación.

Se utiliza la dactilología, escritura en el espacio representando cada letra del alfabeto con un gesto realizado con los dedos y la mano. Esto se utiliza cuando no hay un signo definido para el concepto que se quiere expresar y para precisar significados como antropónimos y topónimos.

Cada región tiene sus variantes gestuales.

Hay signos arbibrarios y signos motivados que parecen lo que representan.

 

 

 

 

 

 

 

 

Sobre el artículo

Categorias: Educación
Ultima modificación: 07/09/2012