Fidias es uno de los escultores más famosos de toda Grecia, también destacó en campos como la pintura o la arquitectura. Nació en Atenas en el año 490 a. C. y murió en Olimpia en el año 431 a. C. A Fidias se le atribuyen las estatuas de la diosa Atenea en la Acrópolis de Atenas y la estatua sedente de Zeus de Olimpia.
Se desconocen los datos acerca de la vida de este magnífico escultor griego perteneciente al período del primer clasicismo griego. No se sabe nada de su formación ni de donde estudió ni quien fue su maestro. Fidias vivió durante el reinado de Pericles el cual quería demostrar la majestuosidad de Atenas por lo que pronto acogió en su seno a Fidias como protegido debido a su talento tanto en la escultura exenta como en el relieve.
Fidias se afianzó en la fama con la estatua de Atenea Lemnia la cual fue destinada a la Acrópolis de Atenas y de la que se conservan dos copias parciales pero sin duda alguna su máxima obra fue la estatua sedente de Zeus de Olimpia considerada una de las siete maravillas del mundo.
La estatua de Zeus se perdió en los diferentes terremotos que asolaron la ciudad pero se dice que media más de doce metros de altura y que estaba tallada en marfil y en oro. Contaba con numerosos elementos decorativos y que tardó un año entero en realizar dicha escultura muestra del grado de detalle y perfeccionamiento.
Dice la leyenda que cuando terminó de esculpir la estatua pidió una señal para saber si la escultura era del agrado del propio dios Zeus. Cuentan que del cielo en el que no había signos de tormenta ni nubes llegó un rayo a los pies de Fidias para confirmar que sí era de su agrado.