Odín es el máximo exponente de la mitología nórdica y el rey de los dioses. Odín es el dios de la guerra, de la magia, de la muerte, de la poesía y de la sabiduría.
Odín reside en el Asgard donde posee dos palacios. Uno de ellos es el Valaskjálf donde se encuentra su trono y desde el que ve todo lo que sucede en los nueve mundos. El otro es el Glasdheim donde se encuentran los relucientes salones del Valhalla en el que acoge a todos los guerreros valerosos caídos en el campo de batalla. Todos estos valerosos guerreros son recogidos del campo de batalla por las hijas de Odín, las valquirias, y una vez en su palacio pasaran a formar parte de su ejercito personal.
Se dice que Odín tiene la apariencia de un anciano con larga barba y al cual le falta uno de los ojos. Según cuenta la mitología dicho ojo lo lanzó a la fuente de la sabiduría como pago para poder beber de ella. Además suele ir vestido con sombrero y va descalzo lo que suele hacer que se le confunda como un peregrino y no como un dios cuando se presenta ante las personas.
A parte de estos elementos característicos se dice que va siempre acompañado por dos cuervos y dos lobos los cuales actúan como sus mascotas. Como elementos mágicos se dice que posee el anillo Dráupnir del cual cada nueve días brota otro idéntico y la lanza Gúngir sobre la que se realizan juramentos que no se pueden romper y la cual nunca falla.