Tal como dice la Biblia, “Cuidarás a tus hijos y a los hijos de tus hijos”, los abuelos son responsables de educar, comprender, escuchar y sostener a sus nietos cuando los padres no puedan hacerlo. Un abuelo cristiano se desempeñará con amor y servirá como guía para aquellos nietos que se sientan incomprendidos por sus padres.
En algunas ocasiones el lazo entre nietos y abuelos se vuelve muy fuerte, es común escuchar que el amor que siente un abuelo o abuela por sus nietos pareciera ser mayor que el que sentían por sus propios hijos, esto se debe a que para ellos, no es necesario corregirlos y educarlos, ya que ese es el trabajo de los padres.
Los nietos se convierten en un estimulo de vida, para los abuelos que se encuentran solos o aislados, esta situación se dará cuando se ha inculcado en los hijos un sentido de servicio y amor al prójimo, de esta manera el hijo lo transmitirá al nieto, la enseñanza de estos valores se logra siempre predicando con el ejemplo y manteniéndose cercanos a Dios, a través de la lectura de la Biblia.
En todos los casos, los abuelos son una fuente de sabiduría, ya que su experiencia los hace conocedores y pacientes. Es la obligación de ellos, transmitir estos conocimientos a sus nietos y ser guías incondicionales para todo aquél que lo necesite, sin imponerles un modelo de vida, de esta manera los nietos podrán formar su propia identidad, con buenos valores y principios.