Si ya te ha pasado que se te hace la hora de la cena de fin de año y no encuentras modo de arreglar tu cabello, te daremos algunas prácticas claves para salir airosa de la situación. Sólo necesitarás algunas horquillas, coletas o sujetadores de cabello de las que todas solemos tener perdidas en nuestro bolso.
Si tienes el cabello largo, sólo recogerlo cuidadosamente en un rodete te garantizará lucir perfecta: junta tu cabello en la zona central posterior de la cabeza como si fueras a hacerte una cola y gírala sobre sí misma tomándola por con ambas manos por sus extremos hasta conseguir una tira maciza de cabello. Si quieres obtener mayor fijación, antes de hacer este paso, sujeta la cola de cabello con una coleta sencilla. Sin soltarla, comienza a enroscarla sobre la base formando un círculo concéntrico e introduce el resto por su orificio, desde el interior al exterior. Sostiene con una mano el círculo base y estira con la otra el resto de cabello a fin de que el atado quede bien tenso. Una vez logrado, puedes dar forma al resto de cabello que quedará en forma de cola o esconderlo girándolo en torno al círculo formado y sujetándolo con unas horquillas invisibles. Para lograr un peinado más elegante y llamativo, puedes hacer este mismo recogido llevando el cabello hacia un lado y terminándolo sobre una de tus orejas.
Para conseguir un recogido más casual con cabello ondulado, puedes llevarlo hacia un lado y simplemente sujetarlo con horquillas en uno de los laterales de la nuca, dejándolo caer hacia el frente, sobre uno de tus hombros. Para fijarlo lo ideal es utilizar un producto especial para este uso. Otra forma de lucir más ingenua y casual es recoger dos mechas de cabello desde los laterales superiores a las orejas y llevarlos hacia el centro posterior de la cabeza. Allí utiliza una coleta para unirlos y, sosteniendo con tus manos esta unión y el extremo de la cola, gírala sobre sí misma hasta conseguir darle peso y uniformidad. Sin soltarlo, introdúcelo en la unión del cabello anterior a la coleta, dejándolo caer nuevamente, de modo que aquélla quede escondida detrás del pelo. Si quieres darle un detalle más especial, puedes trenzar los mechones de pelo antes de unirlos o peinar el cabello una vez recogido de modo que se distinga del resto. En cualquier caso, ayúdate con unas horquillas colocadas sobre tus orejas para darle mayor fijación.