La técnica de cocina a baño maría consiste en hervir agua en un recipiente, mientras añadiéndole otro encima, sin que toque el fondo del primer recipiente, de forma a que el calor del vapor sea lo que cocine los alimentos de una manera uniforme. El baño maría se utiliza para preparar algunas de las recetas más tradicionales como lo son la crema pastelera, tocino de cielo y el flan.
Cocinando a baño maría
Asegúrese de no exagerar en la cantidad de agua que usará para el baño maría, puesto que si ésta es mucha, puede llegar a salpicar los alimentos al momento de ebullición.
Inicie la cocción a baño maría cuando el agua aún esté caliente, de esta manera podrá calcular realmente el tiempo de duración de la cocción.
Coloque en el fondo del recipiente un papel o paño, esto antes de cargar el recipiente con el agua. Esto ayudará a que las burbujas sean mermadas, lo que evitará que el agua hirviendo suba hacia el borde del recipiente y moje los alimentos.
Consiga un paño de felpa que posea un buen tamaño, que sea capaz de cubrir la superficie de ambos recipientes, para ayudar a mantener el calor dentro.
En el caso que utilice molde de savarin o molde de corona en el baño maría, la mezcla de los ingredientes a cocinar será más rápida y uniforme, ya que el calor también alcanzará el centro del recipiente, debido a la forma de este tipo de molde. Para estos casos se debe colocar poca agua en la base, mientras el fuego tendrá que ser de baja intensidad, siendo recomendable que el agua no exceda el molde por el agujero central, para lo que puede colocar cáscaras de huevo vacías, de modo a evitar que al hervir el agua, salpique el interior del molde.