Los disfraces de culturas antiguas son un poco difíciles de hacer, muchos de éstos sólo se utilizan en obras de teatro y durante las épocas navideñas para representar escenas antiguas, un ejemplo de este tipo de disfraz es el de un legionario romano. Este personaje representa un soldado de infantería que resguardaban al imperio romano, estos soldados se caracterizaban por sus grandes túnicas rojas y sandalias doradas. Para poder realizar este disfraz, los pasos a seguir son los siguientes:
- Obtener una túnica de color rojo, ésta deberá llegar debajo del muslo justo por encima de las rodillas, se puede hacer con un pedazo grande de tela de nylon roja, enrollándola al cuerpo por un hombro.
- Recortar ocho tiras delgadas de cartón, aproximadamente de unos 30 centímetros de largo, una ves recortadas deberán cubrirse con papel aluminio, posteriormente se van pegando las tiras en la parte del frente por la parte de la cintura y se cubre con un cuadro el torso; estas placas deberán ir sujetas con alambre para florista y simularán perfectamente la armadura del legionario romano
- Usar un casco de construcción con el visor hacia atrás, con figuras triangulares pegadas forradas igual que la armadura al frente. Con cartón y papel aluminio dorado se diseña un escudo que cubra la cara y el pecho.
- Para finalizar hay que ponerse un cinturón, lo más grande posible, sobre un hombro y pegar sobre éste una vaina donde irá guardada una espada de cartón, las sandalias serán de cuero de preferencia con muchas correas.