Las llagas herpéticas conocidas como herpes oral, son pequeñas erupciones en la epidermis debido a infecciones virales que se alojan en las células nerviosas debajo de nuestra piel, pueden aparecer y desaparecer por lapsos de tiempo o incluso nunca mostrar síntomas, conocido como “Latencia”. Durante los brotes o activación del virus tienden aparecer pequeñas ulceras o protuberancias alrededor de los labios que estallan, se curan y desaparecen por tiempo indefinido. Esto dependerá de que tan sano sea el sistema inmunológico de la persona ya que si posee un sistema débil las erupciones provocadas por el herpes tardaran más tiempo en desaparecer. El acné puede ser fácilmente confundido con el herpes debido a que presentan ciertas similitudes en cuanto a la forma en que se presenta el folículo abierto con la diferencia de que el acné no es más que una afección en el cutis debido a que las glándulas sebáceas originan un exceso de aceite provocando la obstrucción de los poros en la piel por la acumulación de bacterias, células muertas y suciedad que se presenta sobre la piel como un prominencia con pus, esta puede ser blanca u obscura. La presencia de acné en la piel puede darse desde un recién nacido a un adulto mayor ya sea por los cambios hormonales que se dan por la pubertad, periodos menstrúales, embarazos, manejo inadecuado de productos de belleza y exceso de humedad o simplemente ser heredados que tienden a desencadenarse con los mencionados anteriormente.
Si se llegase a mostrar cualquiera de los síntomas mencionados por un tiempo prolongado, es recomendable consultar con el dermatólogo para que se otorgue los antibióticos necesarios según el diagnóstico acertado.