La histeria psicológicamente se define como ansiedad intensa, cuando una persona tiene este desorden mental presenta falta de control absoluto sobre sus emociones y actos que lleva a cabo en un estado de inconciencia repentina. Generalmente este trastorno se presenta en personas con demasiados conflictos emocionales reprimidos; aunque la histeria no es específica de un género, la mayoría de los casos se presentan en mujeres entre 15 y 25 años de edad.
Es imposible definir un solo origen de la histeria ya que en cada persona se presenta un origen diferente dependiendo del ambiente en el que la persona se desarrolle, algunas de las causas son represión sexual, un cuadro hereditario de nerviosismo o enfermedades mentales, ociosidad, pensamientos perversos, poca educación emocional para el control de la ira en los primeros años de vida, depresión, etc. Al igual que las causas, los síntomas que cada persona con este trastorno mental presenta son diferentes, éstos pueden ser:
Síntomas físicos de una persona histérica. Continua pesadez en las extremidades, agudo sentimiento de presión abdominal, dificultad para respirar con normalidad, continuos suspiros, palpitaciones, constricción en el pecho, hinchazón del cuello, sentimiento de un bulto en la garganta, dolor de cabeza, hinchazón de venas yugulares, sofocación, tensión voluntaria de los músculos locomotores y estrechamiento de los dientes. En casos más extremos convulsiones violentas y pérdida de conocimiento.
Síntomas emocionales. Falta de determinación frente a cualquier situación por fácil que parezca, inestabilidad emocional, llantos súbitos o severos, episodios momentáneos de ira descontrolada y anhelo de simpatía y amor.