El estreñimiento o constipación se define como un padecimiento que provoca movimientos intestinales retardados y por consiguiente un ciclo de defecación lento, doloroso e insano. La constipación crónica puede llegar a obstruir el paso de gases y causar el desarrollo de densas e inmóviles masas fecales en el recto.
Sus causas van desde dietas inadecuadas hasta efectos secundarios de medicamentos e incluyen problemas hormonales y toxicidad por metales pesados. De manera que el estreñimiento no es una dolencia sin importancia y debe ser atendida por un facultativo.
Sin embargo, hay algunos remedios y alimentos que pudieran mejorar los síntomas. Uno de ellos consiste en tomar un vaso de agua tibia en ayunas. El agua, además de lubricar y humectar el tracto digestivo, facilita su movilidad estimulando la defecación.
La ingestión de frutas tropicales, como el plátano y el mango, pudieran añadirse al arsenal de remedios contra el estreñimiento. Tanto en batidos como de forma natural, la toma de estas frutas aporta líquido, minerales, enzimas y sobre todo fibra dietética al aparato digestivo, con lo cual las vías intestinales se lubrican y movilizan.
El consumo de vegetales de hojas, leguminosas y frutos secos también añadirán vitalidad a la dieta durante el estreñimiento, contribuyendo a una defecación natural y en ciclos adecuados.