Los murciélagos pertenecen a la familia de los quirópteros son los únicos mamíferos capaces de volar. Estos mamíferos se pueden encontrar en las zonas urbanas de todo el planeta Tierra y, además, en zonas agrestes como bosques y praderas. Los murciélagos suelen vivir en guaridas como pueden ser cuevas, árboles o cualquier otro espacio en el que puedan estar sin riesgo de ser molestados.
La alimentación de los murciélagos es variopinta en la medida en que son omnívoros. Se alimentan de frutas, insectos, peces, plantas, pequeños vertebrados e incluso ingieren la sangre de determinados animales. Poseen una dentadura tan fina y afilada que son capaces de pasar inadvertidos para su presa lo que hace que se alimenten de ellas mientras estas duermen. Son por tanto animales nocturnos que aprovechan la oscuridad para salir en busca de sus presas.
Los murciélagos viven una media de cuatro años. Algunos ejemplares pueden sobrepasar dicha edad pero esto no es muy frecuente. A la hora de descansar lo suelen hacer colgándose de las ramas de los árboles o de las cuevas dejando la cabeza boca abajo. Además, no alcanzan más de quince centímetros de diámetro cuando tienen las alas completamente desplegadas.
La mayoría de los murciélagos son ciegos no obstante poseen una especie de radar o sonar que les sirve para calcular la distancia de la que distan los objetos y, por tanto, sus presas. Este funciona de forma muy sencilla, emiten un ultrasonido que rebota contra los objetos en su radio de acción y este le devuelve un eco de dicho sonido.