El género al que pertenecen las cebras es el Equus, al cual pertenecen también los asnos y los caballos, con la diferencia que la cebra es propia y exclusiva de África. La cebra es un mamífero mediano, herbívoro estricto, consume hierba tosca, brotes de árboles, hojas frescas de arbustos, ramas delgadas, sobre todo de árboles frutales, corteza suave y en ciertas ocasiones raíces. Generalmente se alimentan dos veces al día, por la mañana al salir el sol y por la tarde, reponiéndose durante el medio día cuando hace más calor. Poseen un aparato digestivo bien adaptado a las temperaturas extremas y necesitan menos nutrientes que el resto de los herbívoros para llevar a cabo sus actividades, la desventaja de esta forma de alimentación es que necesitan grandes cantidades de hierba, lo cual las hace pasar gran parte del día pastoreando.
Las cebras se mueven en manadas grandes, un pequeño grupo de cebras puede moverse hasta 20 km en un solo día, regresando por la noche a su lugar de origen para reposar y unirse a un grupo más grande. Aún cuando realizan estos movimientos diariamente, cada año llevan a cabo una migración mayor, al igual que cientos de miles de animales mamíferos en toda la sabana africana, buscando un nuevo sitio para obtener alimento y agua durante el periodo de sequía. La cebra se encuentra perfectamente adaptada a las condiciones de sequía, sobre todo las cebras Grevy que en la temporada más calurosa y seca, utilizan sus pesuñas para escarbar en el lecho de ríos y encontrar agua subterránea.