Photoshop es el programa de edición de imágenes más usado. Para trabajar con Photoshop de manera efectiva, es necesario saber manejar capas. Usando capas puedes dividir una imagen en distintos elementos o secciones y así puedes modificar algunos componentes de la misma sin alterar otros.
El trabajo que realizamos en las capas en Photoshop, se muestra en la ventana Capas. Esta ventana es visible por defecto al iniciar el programa. En esta ventana podemos ver un listado de las capas que forman la imagen con la que estamos trabajando. La capa activa, la capa en la que estamos trabajando, se verá en la lista con fondo azul. Las modificaciones que realicemos se aplicarán solamente sobre esta capa. Para cambiar la capa activa, simplemente haz clic en este listado sobre la capa que quieres modificar. Es importante el orden de las capas pues incide directamente en el diseño de las imágenes, las que están más arriba se muestran sobre las que están debajo, así las capas de arriba pueden tapar contenidos de las capas inferiores.
Una de las utilidades de las capas consiste en que cada capa se puede ubicar de manera independiente. Si tenemos distintos elementos gráficos separados en capas diferentes, formando una imagen, podemos modificar la situación de cada uno de los componentes, sin mover a los demás. Del mismo modo, podrás aplicar efectos sobre uno de estos elementos sin alterar el resto de la imagen.
Otra de las ventajas del uso de capas es que nos permite experimentar con la imagen con libertad, sin miedo a estropearla. Se puede crear una capa nueva, copia de la existente, realizar los cambios sobre esta copia y, si los resultados no son los que deseabas, puedes borrar la nueva capa y quedarte con la original.