Para quien no lo sepa un higrómetro es un instrumento utilizado en meteorología y cuya labor es la de medir el nivel de humedad tanto en el aire como en otros gases. Los hay de dos tipos: el primero es el de absorción, que usa sustancias químicas higroscópicas que absorben y expulsan la humedad del ambiente que las rodea. El segundo tipo es el higrómetro eléctrico, formado por dos electrodos enrollados y que protegen un tejido impregnado de cloruro de litio. Al aplicar calor sobre dichos electrodos, el litio reacciona y se evapora una parte. Se establece así un equilibrio entre la parte evaporada y la absorbida del exterior por el tejido. La diferencia es lo que nos da el resultado de la cantidad de humedad en el ambiente.
Se utilizan a veces otras sustancias como el cloruro de cobalto, que en presencia de humedad lo que hace es cambiar su color por uno más azulado.
En el interior del higrómetro se coloca un sensor que calcula todas las variables y que está testado para dar la mayor fiabilidad posible a los resultados, siendo además un aparato muy genérico, con lo cual casi cualquier marca puede tener uno de ellos en su interior, dando así una calidad de cálculo muy similar unos de otros. El sensor además tiene como ventaja principal su facilidad de uso y la capacidad de enviar los datos cotejados al ordenador en que se trabajen.
Los resultados de una medición higrométrica siempre aparecen expresados en tanto por ciento (%).