Los primeros utensilios de los dentistas proporcionan un vistazo de lo que significaba la profesión de los dentistas en sus primeros años. Las primeras herramientas de los odontólogos incluían taladros y dispositivos de extracción para proporcionan apoyo a los pacientes para aliviar el dolor y la presión de los dientes infectados y las caries. Mientras que los dentistas intentaban aliviar el dolor, las herramientas disponibles ocasionaban mayor miseria que alivio a los pacientes.
Los primeros taladros utilizados para tratar a los pacientes eran taladros de carpinteros adaptados para ser usados en los dientes. Pierre Fauchard inventó el primer taladro dental a finales del siglo XV. Para finales del año 1871, el taladro de dentista había evolucionado hasta convertirse en un aparato operado con un motor usando los pies. Ese antiguo taladro no fue remplazado sino hasta 1957 con el taladro de turbina de aire, el cual desarrolló la práctica de la odontología en el siglo XX.
Los taladros son una herramienta común para los dentistas y son característicos por su fuerte zumbido al ser usados. Esas herramientas de hecho evolucionaron a partir del taladro manual, convirtiéndose en un taladro eléctrico muy ruidoso y para el año 2010, fue creado un nuevo taladro que opera a base de plasma, realiza las mismas operaciones que los taladros de dentistas conocidos hasta hoy pero con menos dolor. Y sin importar que los taladros actuales sean conocidos por su sonido, un nuevo dispositivo puede ahogar el sonido que el taladro emite.